El Escéptico Digital - Edición 2013 - Número 263
Javier Salas
(Noticia publicada originalmente en EsMateria).
Imaginen recibir en su consulta, semana tras semana, a pacientes que reivindican remedios tan inútiles como la homeopatía, las flores de Bach o la imposición de manos. Por desgracia, no es tan extraño. Sin embargo, algunos están convencidos de que se trata de una batalla que hay que librar, para evitar que las terapias pseudocientíficas ganen un milímetro más de terreno. El psicólogo clínico Eparquio Delgado (La Orotava, 1979) quiere pararle los pies a esta “pandemia invisible” que circula por su despacho. “Por mi consulta pasa mucha gente que viene rebotada de curanderos”, lamenta este tinerfeño. En la pasada X Asamblea Federal de Izquierda Unida (IU), partido en el que milita, su voz reclamó con éxito, por primera vez en una formación política española, una postura clara en contra de la presencia de las pseudociencias en la sanidad pública.
Delgado, implicado hace tiempo en movimientos de divulgación científica, también explica que estaba “harto” de que se relacionara a IU con la defensa de lo que se conoce como remedios naturales y las terapias alternativas. “Hay más gente de la que creemos en contra de que se siga ligando a IU con todo ese rollo new age“, afirma, aunque reconoce que estaba convencido de la derrota de su propuesta de resolución en la X Asamblea. Delgado proponía que su partido se alineara con la ciencia y se mostrara beligerante frente a estos remedios, para blindar la Sanidad y que solo incluya terapias eficaces avaladas por la evidencia científica.
El primer obstáculo fue conseguir en apenas unas horas el aval del 25% de los 1.000 delegados que acudieron a este evento, el más importante de la formación. Entre media docena de militantes consiguieron casi 300 firmas, incluidas las de todos los diputados de su formación en el Congreso. Una dura pelea, delegado a delegado, para convencerles de que al menos dejaran que la propuesta se votara. “Algunos no querían ni dejar que expusiéramos nuestra resolución, pero otros venían buscándonos para poder firmar a favor”, recuerda. Llegar a defender su texto ante los delegados era ya todo un logro, rememora, con el que se conformaba. ”Cuando hubo que votar, me giré hacia las butacas para ver a los delegados y estaba seguro de que habíamos perdido”, explicaba cansado pero feliz tras regresar de la capital de España a su pueblo natal. El resultado: 244 votos a favor, 174 en contra y 44 abstenciones.
“Otros partidos apoyan la homeopatía por oportunismo”, critica Delgado
Desde este momento, y por lo menos hasta la próxima Asamblea Federal dentro de cuatro años, los políticos de su partido deben trabajar en favor de las terapias avaladas por la ciencia y en contra de las que no lo están. Es la primera vez que un partido español incluye en su corpus ideológico combatir el uso de la homeopatía, la acupuntura y otras terapias alternativas. Hace justo un año el Ministerio de Sanidad publicó el resultado oficial de un informe que concluía que “la evidencia científica disponible sobre su eficacia es muy escasa y si bien en la mayoría de los casos estas terapias son inocuas, no están completamente exentas de riesgos”.
“No es cosa de rojos y azules”, asegura, “y tampoco se trata de una dicotomía entre compañías farmaceúticas y productos naturales. Hay que aplicar otro parámetro: el de la evidencia”. No estaba solo en su pelea. Desde que lanzó la iniciativa, muchos activistas apoyaron su propuesta de resolución, que contó con el respaldo de cientos de científicos de ocho países distintos. “Todavía siguen llegando correos de apoyo”, cuenta orgulloso Delgado, quien se encuentra preparando un ensayo de denuncia de los libros de autoayuda para la colección ¡Vaya timo! de la editorial Laetoli. Inicialmente, su propuesta era mucho más amplia, y abarcaba críticas a muchas otras corrientes pseudocientíficas como la de los antivacunas.
Un informe de Sanidad concluyó que las llamadas terapias alternativas son inútiles
Prefirió centrar el tiro en una demanda más concreta, sin renunciar a batallas posteriores, para acercarse más a una victoria tan simbólica y decisiva como la lograda. No en vano, al tiempo que Delgado conseguía esta victoria, la misma Asamblea ratificaba otra resolución propuesta por la delegación leonesa “exigiendo la aplicación del principio de precaución a las antenas de telefonía móvil”, una cautela carente de respaldo científico.
Por ello, este psicólogo canario no se conforma con mantenerse vigilante para que la resolución sobre terapias pseudocientíficas sea cumplida por sus compañeros. Pretende organizar distintos eventos dentro del partido que ayuden a divulgar la importancia de las evidencias científicas en lo que respecta a la salud; quiere vencer y convencer. Y llamar la atención al resto de los partidos, “obligarles a pronunciarse” sobre estos asuntos en los que mantienen una posición ambigua, pero abierta al reconocimiento público de la homeopatía o otros remedios milagreros. “El PP, el PSOE y otros partidos saben que la homeopatía es inocua; si la apoyan o no la combaten, creen que no hacen daño a nadie y que, además, consiguen los votos de sus partidarios. Es puro oportunismo político”, critica Delgado.
URL: http://esmateria.com/2012/12/27/una-voz-politica-contra-la-pseudocienci…