el escéptico
mos resultados. Disponer de todos estos conocimientos,
de toda esta información, conduciría, sin ningún género
de dudas, a actitudes bien distintas a las consideradas,
por no decir opuestas.
Que falta mucho conocimiento, o de otra manera, que la
ignorancia abunda, sea dicho esto con el máximo respe-
to, es evidente. No hay más que percatarse de la popula-
ridad de las pseudociencias, o de los metros cuadrados de
pseudohistoria en los estantes de las librerías.
La cuestión es: ¿cuál es la causa de esa ignorancia? Po-
siblemente se trate de la conjunción de dos factores: en
primer lugar, falta de información o, peor aún, una caó-
tica mezcla de informaciones contradictorias, que suelen
ser tratadas por los medios como igualmente válidas, en
el marco actual del relativismo cultural, tan políticamen-
te correcto. Y en segundo lugar, en una alarmante falta
de interés (“creer es fácil, lo difícil es saber”, una frase
estupenda de la que –me vais a perdonar- no recuerdo su
autor). Los educadores, como el que esto firma, tenemos
la obligación moral de incidir en ambos condicionantes.
Sobre todo en el segundo, mostrando que la realidad es
fascinante (y debe notarse que a nosotros nos lo pare-
ce) y, afortunadamente, comprensible. Debemos lograr-
lo cuando aún es tiempo, antes de que la entrada en la
vida adulta haga a nuestros jóvenes oyentes demasiado
conformistas. Y debemos, además de proporcionarles
conocimientos (cuántos de ellos se irán olvidando con
el tiempo), enseñarles sobre todo a dudar -no a no creer-,
a buscar fuentes fiables de información, a contrastar, a
saber que hay verdades absolutas y que por tanto no son
opinables...
Quizá ahora que se pone en marcha la asignatura de Edu-
cación para la Ciudadanía es el momento de hacer un
hueco a esta manera de educar a nuestros hijos que no es
otra cosa, si bien lo pensamos, que enseñarles a ser libres
de verdad.
Página web de homeopatía.net, de la Dra. Concepción Calleja,
favorable a este tipo de supuesta terapia, con el ‘lógico’ apoyo
de los laboratorios Boiron, dedicados a la venta de estos pro-
ductos. (homeopatia.net)