el esc
é
ptico
13
verano 2015
tructuralista, seica nun exceso de apaixonamento, saíu por
unha das grandes fiestras abertas do salón, de xeito que se
precipitou deseguida ao baleiro e foi dar co seu corpo con-
tra o chan da rúa, que o golpeou cos seus 9 500 joules e
morreu decontado.
Falouse moito das posíbeis causas do accidente: comen-
taban algúns congresistas que a suspensión da lei tan só era
válida no recinto da asemblea; outros opinaban que se tra-
taba sen dúbida dun herexe, que seguía a crer firmemente
na universalidade da acción dos campos potenciais. Pero a
hipótese máis probábel é que fose alguén que, simplemen-
te, non cría na democracia.
Juan Rodríguez García
Accésit: DESPERTAR
Volvió en sí después de dos días en coma. No recordaba
qué le había ocurrido. De hecho, no recordaba ni su propio
nombre. Desde una silla junto a su cama en el hospital la
miraba de hito en hito un joven moreno y con barba que le
había asegurado ser su marido. Que le había hablado de un
accidente tonto: un resbalón y una caída por unas escaleras.
Se palpó la cabeza vendada. Le dolía.
- Dicen los médicos que te estás reponiendo perfecta-
mente. Te van a dar el alta esta tarde, la herida no es grave
y te la puedo curar yo en casa. Recuperarás la memoria
pronto, al menos eso dicen. Seguro que te ayuda volver a
casa y a la rutina. Y Pedrito está deseando verte.
Se dejó llevar a un piso que, para su alegría, le sonó vaga-
mente familiar. Un niño de cuatro años corrió a echarse en
sus brazos. Aquella sensación también le resultó conocida.
En cambio no sabía dónde estaban las habitaciones ni cuál
era su lado de la cama. Se puso la crema facial que encontró
en el armarito del cuarto de baño, se cepilló los dientes con
un cepillo rosa confiando en que fuera el suyo y se puso
un pijama con estampado de ositos porque era de su talla,
aunque le resultó algo infantil.
- ¿No te vas a tomar los gránulos esta noche?, preguntó
el joven de la barba.
- ¿Gránulos?
- La medicina homeopática para tu dolor de estómago.
Miró el frasco, leyó la etiqueta y no le encontró ni pies
ni cabeza.
- Aquí dice que esto es lactosa y sacarosa.
- Bueno, es homeopatía. La tomas desde el verano, cuan-
do fuiste al médico naturista que te recomendó Pilar. De-
cías que era un tratamiento a largo plazo y lo combinabas
con una dieta depurativa para eliminar las toxinas que ha-
bías ido acumulando durante años.
- ¿Una dieta?
- Dejaste de comer algunas cosas. Bueno, bastantes co-
sas. Menos mal que no me obligabas a hacer lo mismo,
respondió él con una sonrisa guasona.
Al día siguiente vino alguien que dijo ser su terapeuta.
Musitó algo así como “reiki”.
- ¿Y eso qué es?
- Llevamos seis meses de tratamiento. Te transmito ener-
gía sin tocarte, acercándote las manos. Siempre dices que te
relaja y te alivia los dolores.
Empezó a pensar que le estaba tomando el pelo. No le
dolía el estómago ni se sentía tensa. Se disculpó ante la
terapeuta y aplazó la cita una semana, o mejor dos.
Sonó el teléfono. Una amiga a la que no recordaba la con-
vocaba a una manifestación contra los chemtrails. A otra
más, de lo cual dedujo que ya había asistido a alguna.
- ¿Los qué?
- Ay, ya, que aún te falla la memoria, me lo ha explicado
Pepe, pero no te preocupes, mujer, yo te lo cuento. Es que
nos están envenenando desde lo alto. Los aviones sueltan
productos químicos que caen sobre nosotros. Hay que con-
cienciar a la gente y recoger firmas para que esto pare. Te-
nemos un grupo de activistas estupendo. También estamos
en lo de las escuelas sin wifi.
Se disculpó también. Fue a rebuscar en los cajones, a ver
si tenía un diario o una agenda o algo. Dudaba de su salud
mental. ¿Qué clase de persona era para creerse que unas
pastillas de azúcar le quitaban el dolor, que una pipiola la
relajaba sin tocarla y que alguien fumigaba a los humanos
desde un avión?
Y casi deseó no recuperar la memoria.
Inmaculada León Cobos
Desgranando Ciencia 2014
Cuando el escepticismo aborda un evento
La ciencia inundó las calles de Granada el pasado 8 de
Diciembre de 2014. Eso solo puede significar una cosa:
“Los componentes de Hablando de Ciencia la volvieron a
liar en Granada”. A su vez, el evento Desgranando ciencia
se vio abordado por el escepticismo, como debe ser.
La Sociedad para el Avance del Pensamiento Crítico no
solamente estuvo presente a través de sus miembros (al-
gunos fueron en calidad de ponente, otros a través de es-
pectáculos de Magia e ilusionismo y otros como Guillermo
Hernández y Eustoquio Molina, que simplemente tuvieron
el buen juicio de asistir a ver el evento), sino que además es
uno de nuestros más estimados patrocinadores del evento.
La gente tuvo la oportunidad de conocer la revista El es-
céptico y la asociación gracias al stand con roll-up, tríptico
y revistas ubicado en la zona de talleres.
Desgranando Ciencia es el evento de divulgación por
excelencia. Organizado por la asociación de divulgación
Hablando de Ciencia y con la colaboración de la Funda-
ción Descubre, cuenta con el apoyo institucional de la Uni-
versidad de Granada, el CSIC y el Parque de las Ciencias
además del patrocinio y colaboración de empresas privadas
como Neuron, ALSA y Coca-Cola, y entidades como CEA-
MA, la Federación de Jóvenes Investigadores Químicos,
GENYO, SEO-Birdlife y Mustela, Vector, Mc-Fly, etc. La
diversidad tanto de sus organizadores como de sus patro-
cinadores y visitantes hacen de este evento uno de los más
completos, especiales y prolongados en el tiempo dentro
del panorama de la divulgación en España.
En su primera edición, Desgranando Ciencia convocó a
más de 1500 personas en tan solo dos días en el Parque de
las Ciencias de Granada (además de las más de 500 que lle-
garon a ver a la vez el streaming online). En esta ocasión el
evento duró una tarde más… pero las visitas fueron más de
3500 sumadas a alrededor de 800 personas que nos seguían
por Internet. Pero, ¿qué ofreció Desgranando Ciencia?
Desgranando Ciencia este año se ha partido en tres fa-