En un lugar del País Vasco de cuyo nombre preferimos acordarnos (Vitoria, para más señas) se desarrolló del 14 al 18 de enero de 1985, con gran éxito de público, el "III Festival Internacional de Circo OVNI del País Vasco". Participaron en este "Festival" fabulistas de la talla de A. Orilla, J. J. Ramírez, Ch. Baerlich y F. Martinez del Pozo.
El "Festival" fue subvencionado por la Caja Estatal de Ahorros de Alava. Todo lo relacionado con la organización lo llevó a cabo P. Prurruguza, que el 24 de julio de 1980 observó en el Condado de Tepillé un objeto colante identificado (alias "portentosa nave extraterrestre"), logrando que posase para que él pintase un cuadro. Según el conocido cuentista J. J. Ramírez, en el lienzo quedó plasmada toda la magnificiencia extraterrestre; aunque los que a sí mismos se llaman serios dijeran que todo era un montaje y lo que aparecía en el cuadro era perfectamente identidicable.
Además, como diría el conocido fabulista, confirmó el testimonio de Prurruguza el hecho de que un industrial le pagara al testigo quinientas mis pesetas por el derecho a hacer lo que le diera la gana a partir de la imagen del lienzo original (posiblemente camisetas, llaveros, carteles, etc.) siempre que fuera con fines lucrativos.
Prurruguza es la persona adecuada para organizar este tipo de actos, y si hay algo que agradecerle es que no trajo a nadie con una mínima capacidad racional, que hubiera podido desmentir lo que dijeron los artistas invitados. Tenemos constancia de que el público al que se dirije Prurruguza los que le gustan son Orilla, Ramírez, Baerlich y Martínez del Pozo; lo demuestra el hecho de que los residentes en los sanatorios mentales más renombrados del país fueron quienes eligieron, por unaminidad, la relación de fabulistas invitados. En este "Festival" se observó una total identificación entre público potencial y cuentistas invitados que no hubiese sido tal si hubiera venido algún serio.
El primer día Adolfo Orilla presentó el número: "¿Dónde están las llaves, matarile-rile-rile? Están en los secuestros, matarile-rile-ron, chim pom". Respecto a los recuestros, ¡apaga y vámonos!, ni una prueba y mucha palabrería harto conocida. Orilla, cuyo último atentado impreso a la hora de escribir estas líneas se titula "Galería de preciados", volvió a decir que los OVNI's son en verdad "supermáquinas extraterrestres", aunque como es natural no presentó ninguna prueba tangible. Nos gustaría que nos explicase, por poner sólo un ejemplo, como es posible que esas "supermáquinas" se estrellen (él dice que se han estrellado) a la manera de vulgares aviones terrestres (se supone que los sufridos contribuyentes alienígenas sufriran una muy dura presión fiscal con el fin de mantener el nivel de "castañazos" de que hablan Orilla y otros cuentistas).
Al día siguiente Charly Baerlich, autor del archi-conocido tebeo "El Triángulo de las Mentiras", actuó con el espectáculo "La Atlántida da muy buenos dividendos a los que sabemos explotar el tema". Traer a Baerlich costó a la organización alrededor de medio millón de pesetas, peró lo mereció porqué es un gran fabulista: lo que no sabe se lo inventa. Cuando escribió el tebeo "El Triángulo de las Mentiras" demostró que para que un enigma lo siguiese siendo no tenían que facilitarse todos los datos; fue una lástima que Larry Kusche pillara el truco y lo denunciara públicamente. Por desgracia para Baerlich, le ocurrió lo mismo con sus libros sobre OVNI's estrellados y destructores transportados al margen del tiempo y del espacio. Pero no hay problema porqué las elucubraciones sobre la Atlántida siempre dan dinero.
El tercer día J. J. Ramírez actuó en "Veinte lustros de fotos de l00 que para mí son naves extraterrestres, aunque la mayoría de los científicos (¡tradicionalistas estancados ellos!) no quieran aceptarlo". El número ya lo habíamos visto en Bilbao y la verdad es que es triste que nadie haya evitado que se vuelve a representar. Los veinte lustros de fotos se quedan en nada (las fotos claras son trucajes y el resto corresponden a "cagaditas de mosca"), dando así la razón a los malditos investigadores serios. J.J. Ramírez manifestó que aquel día cumplia sus 2.537.843,27 kilómetros tras los OVNI's, y para demostrarlo nos enseñó el cuentakilómetros que lleva siempre en el tacón del zapato del pie derecho.
Respecto a laq intervención de Francisco Martínez del Pozo, presentador de los programas de televisión "La Puerta del Ministerio" y "Más Acá", representó el espectáculo "El alcohol como vía de aproximación al fenómeno OVNI y las alucinaciones". La última obra que ha publicado se titula "El síndrome de abstinencia alcohólica y la falta de observaciones OVNI". Martínez del Pozo mostró su contento al enterarse de que es posible que el año que viene también haya "Festival" y dijo que, ante tal hecho, pensaba trasladar su consulta de "Majaretología" al País Vasco (concretamente a Vitoria).
El último día hubo una mesa redonda en la que algunos de los antedichos fabulistas respondieron las preguntas que les hicieron los fervorosos creyentes.
El "Festival" sirvió, además, para que se vendieran ejemplares de los libros que los cuentistas habían perpetrado durante el pasado año (curiosamente todos publicados por la misma editorial: "Astro Frío").
Una vez finalizado el "Festival" se observó un incremento ostensible en el número de ingresos en sanatorios psiquiátricos, hecho que viene sucediendo sistemáticamente por estas fechas desde hace tres años. Algunos de los llamados serios ven una posible relacion causa (asistencia al "Festival") - efecto (locura galopante).
Fuentes serias nos han manifestado su deseo de que este sea el último año que este horroroso "Circo" visite Vitoria, y esperan que la Caja Estatal de Ahorros de Alava se de cuenta de que este tipo de actos sólo sirven para que los artistas invitados vean aumentadas las ventas de sus embrutecedoras obras.
Los serios suelen denunciar el carácter irracional de estos festivales y su finalidad comercial; nosotros no sabemos que pensar.
(Texto de la caricatura: "El famoso ufólogo e investigador de campo J.J. Ramírez en fotografía que le tomamos en el XV Congreso de Ufólogos Preclaros, celebrado en Wisconsin del Norte. J. J. Ramírez, que avistó personalmente un grupo de extraterrestres a menos de tres kilómetros, nos describía en ese momento cómo tenían las pestañas.")