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De Oca a Oca FOMENTO DE NATALIDAD Y CAMBIO CLIMÁTICO Félix Ares A hora están de moda todas aquellas acciones que tiendan a disminuir el cambio climático. Lo cuál, sin duda, me parece bien. Lo que ya no me parece tan bien es que muchas de esas acciones se proponen en paralelo con un incentivo a la natalidad. Sin ir más lejos, en la Guía de Buenas Prácticas de la Empresa Flexible 2007, publicada por la IESE y la Comunidad de Madrid, cuyos autores son: Nuria Chinchilla y Consuleo León, se dice: «En el pasado no existían políticas que protegieran activamente el medio ambiente. Había una falta de conciencia en las empresas de estar destruyendo y dañando el planeta tierra. Nos tomó tiempo entender y aprender los múltiples efectos perversos que llegan por no proteger el medio ambiente. Ahora sabemos que tenemos la necesidad de preservar los recursos naturales en el planeta para nuestro uso y para el uso de las futuras generaciones, y las empresas que contaminan el aire o los ríos tienen que pagar sanciones. Con ellas pueden ponerse en marcha piscifactorías que repueblen los ríos». Casi nada que objetar a este párrafo, salvo la última frase que no es que esté mal, es que me parece muy traída por los pelos. Me imagino que con el dinero de las sanciones por contaminar el aire o los ríos se podrán hacer más cosas que «piscifactorías que repueblen los ríos». Para mi hay una cierta incoherencia entre este párrafo Por un lado proponen no contaminar y a renglón seguido piden medidas para aumentar la natalidad. Para mi esto es una incoherencia". y uno posterior en el el que se dice: «Parece ser que la teoría maltusiana nos engañó. No sobran personas en el planeta, parece ser que faltan, al menos determinados perfiles. Nuestra baja natalidad es algo patente también en universidades donde la batalla por el alumno está a la orden del día. Y, sin embargo, no hay suficientes plazas de guardería». Por un lado proponen no contaminar y a renglón seguido piden medidas para aumentar la natalidad. Para mi esto es una incoherencia. La contaminación del planeta procede básicamente de que somos 6 500 millones de personas. Hoy por hoy, el nivel de vida está relacionado con el consumo de energía; tal vez no del todo lineal, como se demuestra Evolución histórica de la población mundial. (Juan Carlos Martínez Coll. Demografía , 2001) el escéptico 24 con el altísimo consumo energético de Estados Unidos frente a países con nivel de vida similar como puede ser la zona euro. Se puede tener un buen nivel de vida con un consumo energético menor que el Estados Unidos, pero no sin consumo energético. El nivel de vida se basa en gran medida en el consumo energía y materias primas. Y según se van aproximando a nuestros niveles de vida países, hoy por hoy más atrasados, como China o la India su consumo energético «per capita» va aumentando. Bien es verdad que los países que llegan a un elevado nivel de vida no tienen por qué seguir nuestro modelo. Es de esperar, por el bien de todos, que sigan uno mucho mejor. Pero lo que es indudable es que más nivel de vida va a exigir más energía. Si los países emergentes lo hacen bien, su consumo «per capita» no llegará a las barbaridades a las que hemos llegado nosotros, pero aumentará. Y ya sabemos que si todos los habitantes de la tierra consumiéramos la misma energía y las materias primas que un ciudadano estadounidense necesitaríamos más de tres tierras. Niños africanos con portátiles OLPC. (Khaled Hassounah) mayores que jóvenes en edad de trabajar. Cada vez el trabajador activo tiene que soportar a más pasivos. Sé que con la disminución de la natalidad que hubo en la década de los 80 hoy las universidades se están quedando vacías, y los puestos de trabajo de gente formada se quedan sin cubrir porque no hay jóvenes. Eso parece indicar que necesitamos más jóvenes, que necesitamos aumentar la natalidad. Indudablemente nos encontramos ante un dilema: el mantenimiento del sistema de pensiones y del funcionamiento de las empresas exigen nuevos jóvenes, que no hay porque ha disminuido la natalidad. Una solución puede ser el aumento de natalidad. Pero el aumento de natalidad implica una situación no sostenible para la tierra. Estamos en la desagradable situación de que un nuevo occidental consume tanto que puede llevar a la muerte por inanición a media docena de personas del tercer mundo. No es que los mate directamente, es que detrae del sistema una cantidad de recursos que hace que muchas personas del tercer mundo mueran por falta de ellos. ¿Soluciones? Varias, y todas deben ir en paralelo. Una) no fomentar la natalidad. Nuevos jóvenes los podemos traer de fuera y darles una oportunidad que no tendrían en su tierra. Dos) No «tirar a la basura» a las personas mayores. Siguen pudiendo trabajar y, además, aportan algo que no tienen los jóvenes: experiencia. Tal vez en jornada parcial o con horarios adaptados... Tres) ir a tecnologías que consuman menos energía y menos materias primas. Cuatro) aumentar la productividad de cada persona joven activa. Y eso se logra con más robots, más automatización, más inteligencia artificial, procesos más eficientes,.... Cinco) ir pensando en cambiar nuestro modo de vida. El que hemos creado no es sostenible. 25 Si el planeta ya no puede sostener el actual número de habitantes con un nivel de vida digno, me parece temerario pedir un aumento de natalidad". La población sigue creciendo, y, en general, su nivel de vida y su consumo energético y de materias primas también. Un ejemplo lo estamos viendo palpablemente en la construcción de nuevas centrales de producción de energía en China e India que se cuentan por centenares cada año. Y la población sigue creciendo... Si el planeta ya no puede sostener el actual número de habitantes con un nivel de vida digno, me parece temerario pedir un aumento de natalidad. Al menos, con nuestras tecnologías y con nuestras culturas que exigen un alto consumo para un buen nivel de vida. Seguro que con el tiempo la cantidad de energía y de materias primas que necesitará cada persona disminuirán y seguro que hay sistemas sociales mucho menos consumistas (de energía y de materias primas). Pero hoy por hoy, un nivel de vida razonable exige un mayor consumo del que la tierra se puede permitir. Por tanto, me parece suicida fomentar la natalidad. En todo caso lo que tendremos que fomentar es la no-natalidad. Sé perfectamente que en este momento en España y en muchos países europeos tenemos problemas de población. La pirámide de edad está invertida, hay más personas el escéptico